Cuando usted come, los alimentos pasan de la boca al estómago a través del esófago. En la unión del esófago con el estómago existe un mecanismo valvular que se llama esfínter esofágico inferior (EEI) que permite el pasaje delos alimentos en un sólo sentido. Si el EEI no funciona bien, los alimentos y el ácido del estómago regresan al esófago produciendo el reflujo.
Cerca de un 10% de la población sufre de ésta patología y en un 2% de ellos se generan lesiones en el esófago (esofagitis). Una hernia hiatal puede o no coexistir con el RGE.
Los síntomas más frecuentes son: Acidez (Sensación de quemazón) detrás del esternón y sabor ácido o amargo en la garganta.
Menos frecuente se presenta como:
- Dolor en el abdomen superior.
- Dolor de pecho.
- Dificultad o dolor al tragar Laringitis o disfonia recurrente.
- Tos crónica, asma nocturna, sinusitis crónica.
- Regurgitación de alimentos sólidos o líquidos.
- Caries recurrentes Neumonías a repetición.
- Despertarse con sensación de ahogo.
Progresión del reflujo: Cuando la mucosa del esófago está expuesta por mucho tiempo a los ácidos del estómago, se pueden producir inflamación, úlceras y cicatrices. Los pacientes pueden tener dolor al tragar y sentir que se atoran los alimentos.
Esófago de Barrett: Ocurre cuando la mucosa (revestimiento interno) normal del esófago cambia por una mucosa anormal en respuesta a la agresión continua del ácido. Estas nuevas células son más resistentes a la agresión ácida, pero a su vez tienen mayor potencial de transformarse en células malignas (cáncer).
Cómo se estudia?
Su historia clínica y el examen físico ayudarán al médico a determinar, junto con el resultado de los estudios, cuál es el mejor tratamiento para sus síntomas.
RX Seriada esófago-gástrica: Radiografías que muestran la función del esófago en forma dinámica; puede demostrar la presencia de una hernia hiatal.
Vídeo endoscopía digestiva: Permite ver en forma directa la mucosa (revestimiento interior) del esófago, estómago y duodeno; de ser necesario permite tomar biopsias.
Manometría esofágica: mide el tono muscular (fuerza) del EEI y cómo funciona el esófago al avanzar los alimentos. Permite descartar otras patologías funcionales del esófago.
Medición del pH de 24hs: registra cuánto ácido sale del estómago hacia el esófago en un día.
Tratamiento:
Cambios del estilo de vida:
Algunos alimentos aumentan la producción de ácido del estómago o relajan el EEI. Deben evitarse: Café – té – gaseosas – fritos – grasas – condimentos – frutas ácidas – tomate – cebolla – menta – chocolate.
Para bajar la presión del EEI se deben hacer 6 comidas pequeñas diarias en vez de 3 abundantes.
Después de comer no se agache, no se recueste, ni duerma por unas 2 a 4 hs. La posición horizontal favorece el reflujo, por lo tanto levante la cabecera de la cama 15-20 cm.
No beba alcohol, ni fume (relajan el EEI).
Disminuya la presión en el abdomen: Baje de peso, no use ropa
Tratamiento médico:
Consiste en neutralizar el ácido del estómago con drogas antiácidas, disminuir la producción del ácido y estimular el vaciado gástrico.
Tratamiento quirúrgico:
El objetivo de la cirugía es reestablecer la presión y función normal del EEI. Esto se logra envolviendo el esófago con el extremo superior del estómago (Fundoplicatura). Si coexiste una hernia hiatal, durante la cirugía se reintroduce el estómago a la cavidad abdominal y se estrecha el hiato diafragmático con algunos puntos. Se realiza con un abordaje mini-invasivo (laparoscopía).